La economía europea se resiente por los crecientes precios de la energía, de los materiales y de personal. En cuanto a los efectos sobre el transporte de mercancías por carretera señalar que los proveedores de servicios de transporte paralizan sus capacidades que ya eran escasas. El desequilibrio se agrava, tal como documenta el barómetro del transporte de TIMOCOM.
Los cuellos de botella en el transporte alimentan la espiral de precios en Europa. A pesar de la continua escasez de abastecimiento, materias primas y piezas de suministro en producción, la demanda de transportes por carretera sigue siendo alta. Mientras que la demanda continúa subiendo, la falta de camioneros y los cuellos de botella en el sector del transporte inflan la espiral de precios. La relación entre ofertas de cargas y de camiones en Europa está muy descompensada, tal como ha quedado patente en el segundo trimestre.